miércoles, 25 de febrero de 2015

"Default mode of polite society"

"-I know you, Watson. I know you'll never be happy within the confines of a "traditional relationship", and I said what I said because it pains me to see how you try to fit in one simply because it's the default mode of polite society.

-There's no reason to feel pain because I'm happy with Andrew.

-Or, will you be happier without him? Or, alternatively with him as an occasional sex partner and confident? Or with him when he's in this space and free to pursuit other interests when he is not? There's any number of possible arrangements. All you need to do is find one who is true to your nature."
Fragmento de "Elementary". S03E07.







"...somos los únicos miembros de una sociedad secreta..."



martes, 24 de febrero de 2015

¿Ver, mirar o contemplar?

"Ver, es solo eso, ver. Sin más. Se puede ver y no sentir nada. Se puede ver y sentir alguna alteración, básicamente instintiva. Placer o dolor. Agradable o desagradable. En el ver solo hay impacto o indiferencia. El ver puede ser inerte, sin apenas vida. Muchas personas, en pleno siglo XXI, aún siguen viviendo en la etapa más primigenia de su existencia. Dicho de otro modo, se limitan a ver cómo la vida pasa ante sus ojos".
(...)
"En el mirar existe sin duda intención. Hemos decidido qué ver. Y lo hacemos cuando queremos conocer o cuando pretendemos llegar al fondo del otro y al trasfondo de la cuestión. Necesitamos mirar para certificar, para curiosear, para descubrir, para encontrar en lo mirado nuestro deseo o para desvelar verdades: ¡Dímelo a la cara! ¡Mírame cuando te hablo! Exigimos la mirada para captar en ella el reflejo del alma. Hay quien expresa su temor a ser mirado y también quien afirma que puede mirar a los ojos de todo el mundo porque no tiene nada que ocultar".
(...)
"Raimon Panikkar decía que todo lo que somos capaces de conocer no es el conocimiento último. No es suficiente con ver, e incluso con mirar concienzudamente para conocer. Hay una aprehensión de la realidad que pertenece solo al rango de la contemplación. Es la verdad intuida, revelada, descubierta a través de los ojos que miran hacia dentro".


Extractos de reportaje de Xavier Guix sobre Antonio Damasio, investigador en neurociencia, neurología y psicología.





A veces tienes que salir de tu escondite para redescubrir tu ciudad, esa que lleva años viéndote crecer, esa que tú creías conocer porque tantas, tantas veces la has visto. Pero hacía tiempo que no te parabas a mirarla, a contemplarla... Yo lo he hecho, y este es el resultado:




En la edición de este post, me acompañaba ella...




Buenas noches, mi querida Sevilla...



Fotos by Rocío Díaz.- 02/2015 #sinfiltros

lunes, 23 de febrero de 2015

Los amantes de Bilbao

Viernes, 13.00 horas, reunión de trabajo. Brrrr, brrrrr, mensaje al móvil, de alguien desconocido, con un nombre impronunciable que ni siquiera termino de entender. 


"Hola amante! Somos los dos mocitos de Bilbao que vamos a conquistar tu corazón"

Suelto el móvil, cara de asombro, "se habrán confundido", dejo que mi mente regrese a la reunión. Minutos más tarde recibo un segundo mensaje del misterioso personaje de nombre impronunciable, y entonces entiendo: son dos amigos de una amiga vasca que como me comentaba a principios de semana, venían a la ciudad de fin de semana y les dejó mi teléfono para conocernos. (El capítulo de mi amiga vasca y cómo nos conocimos bien merece uno o varios posts aparte, que ya vendrán). Así que tres mensajes más tarde, una llamada entrecortada de teléfono, y las ganas de conocer a mis amantes, al final no quedamos esa noche, por lo que hago otros planes y me voy al cine. (El capítulo del cine también merece otro post, añadido a la lista de "to do things")

El sábado, tras una comida con otros amigos y un par de cervezas, me dispongo a regresar a casa cuando los amantes me vuelven a escribir, esta vez para citarnos y por fin conocernos. Ellos se alojan en el centro histórico, y yo ando por ahí cerca. Cuando les digo esto, me preguntan "¿dónde está el centro?". 
(Imaginaros el emoticono que uso para responder a eso vía mensaje de texto)
¡Así que finalmente nos conocemos! Qué nervios, dos amantes vascos sólo para mí...
Ahora viene la parte en que parece que cuento un chiste o que hablo de la película que tan famosas ha hecho a ambas tierras, andaluza y vasca. "Van dos vascos y una sevillana por la calle..." Nos presentamos, y tanto ellos como yo parecemos extranjeros en nuestras tierras: Ellos, Aitor e Iker, de Bilbao. Yo, Rocío, de Sevilla. Estupendo. Y entonces llega ese mágico momento, entre saludos, disculpas y presentaciones, en que me dicen: "¡te hemos traído un regalo!"  (...)

(Ahora también estáis pensando en el mismo emoticono que yo, ¿cierto?) 

Hace tiempo que no recibo un regalo sin motivo alguno. Quiero decir, cuando es mi cumpleaños, por navidad, etc., estamos acostumbrados a recibir y dar regalos. Pero eso de que dos mocitos de Bilbao, que ni siquiera saben si me van a llegar a conocer, aparezcan con un regalo envuelto 800 km atrás, ciertamente me deja sin respiración. No lo abro en el momento porque me dicen que son chocolates. Pero un paseo y unas risas más tarde, tomando un café y lo más parecido a unos kalimochos, decido abrir mis chocolates que vienen muy al caso. Y encuentro esto...

Vuelta a los emoticonos. 
Se llaman "bilbainitos" (emoticono x 5), y aparte de ser inmensamente graciosos, están hechos de sólo de chocolate haciéndolos deliciosamente exquisitos. ¡A ver cuánto dura la caja...!
¿Qué más necesita una mujer si no son dos amantes que han viajado 800 km para conocerla y traerle una caja de bilbainitos (emoticono x 6) de chocolate?!!!

Bromas aparte, esa tarde/noche lo pasamos muy bien, nos reímos, charlamos, tomamos algo, y en definitiva disfrutamos de un buen rato, la verdad. Al despedirnos, cruzamos abrazos como si hiciera años que nos conocemos, y esto me conmueve aún más. 
Una de las cosas que más disfruto en esta vida es viajar y conocer lugares y gentes. Y cuando es la montaña la que viene a Mahoma, igualmente disfruto la gente que me trae para conocer. Me encanta descubrir la visión de cada individuo que se cruza en mi camino.

Quiero pensar que las casualidades existen, que las cosas pasan por alguna razón. Porque mi amiga vasca la que merece un post aparte, y yo, no hemos hablado durante casi año y medio, hasta que por casualidad hace tres semanas me mandó un mensaje y retomamos un poco el contacto. Por casualidad, días más tarde me dice que sus amigos vienen a Sevilla. Por casualidad quedamos. Por casualidad tengo parte de un fin de semana un poco diferente en el que conozco a gente simpática y divertida, gente sana, y con inquietudes similares a las mías. Será que no soy tan diferente...por casualidad.
Pena que el domingo me encuentro un poco enferma y no podemos volver a quedar. Intentamos despedirnos hoy lunes por la mañana con desayuno sevillano de por medio, pero sigo un poco enferma y tengo que cancelarlo, les deseo buen viaje y con suerte nos volvamos a encontrar pronto. Adoro la respuesta de uno de ellos vía mensaje de texto:

"Te keremos, alikata!!! Un montón de besos y pórtate mal! Tenemos toda la vida pa disfrutar, así que tranki. (emoticonos de besos)"

Nótese el carácter vasco del mensaje, lleno de caracteres "k" que sustituyen a caracteres "qu". Pero sobre todo, nótese la riqueza personal que desprende. Personas que acabo de conocer, aunque vengan de parte de alguien en común, abandonan sus convencionalismos y se despojan de tabús sociales para demostrar un interés sano y un cariño por alguien que apenas acaban de conocer. La sensación que el mensaje provoca no es otra sino confort y satisfacción. Así que empiezo la semana enriquecida, porque este fin de semana he viajado para encontrarme con mis amantes de Bilbao, y ha resultado ser una experiencia bilbainita bien dulce. Como muestra, recordatorio fotográfico del momento...
Agur!

Os dejo con una canción que justo estoy escuchando mientras escribo, y viene como anillo al dedo para ser guinda del pastel de hoy:









domingo, 22 de febrero de 2015

Chichones y manos de trapo

Siempre he creído tener una forma muy particular de entender la vida que es quizás la que me ha traído aquí, la que siempre me ha hecho sentirme diferente de la mayoría, distinta de "lo normal". De niña fui siempre muy tranquila y me pasaba horas literalmente "en mi mundo", hasta el punto de ir caminando por la calle y chocarme con farolas o señales de tráfico, mientras se oía la voz de fondo de mis padres diciendo "Rocío, hija, ¿otra vez?". Sí, quizás era un poco torpe, lo reconozco, aunque mi teoría es que en realidad necesitaba gafas y hasta que las tuve no podía calcular bien la distancia real entre mi frente y el poste, así que al final ambos decidían establecer una relación íntima entre ellos al tiempo que me provocaban un agudo dolorcito y consecuente llanto.


Mi familia siempre decía que "tenía pies y manos de trapo", y por esta razón me chocaba con farolas o se me caían las cosas de las manos. Durante mucho tiempo me lo creí, pero con los años he desarrollado una visión diferente: no me interesaba aferrarme a nada y por eso todo se me caía de las manos, porque mientras el mundo se empeñaba en darme una etiqueta, yo quería observar a mi alrededor y disfrutar de todo cuanto descubría. Hablaba poco, opinaba menos, y era extremadamente sensible, pero en mi interior yo era fuerte y tenía mucho que decir. Tardé años en lanzarme y expresar, y hasta que eso ocurrió, me dediqué a ser lo que era, a cumplir con mis obligaciones como hija, como hermana, como estudiante... Aunque no era capaz de decir "esta boca es mía", en mi mundo interior me forjaba una opinión, un pensamiento, una idea, o una conclusión. Así que en esa independencia de mi interior que analizaba mi día a día de un modo muy secreto, me fui haciendo mayor. Hasta que por fin llegó el día en el que abrí la puerta de mi alacena y decidí vencer ese mutismo que me caracterizaba. Empecé a hablar, y vaya si hablé...

Este blog no es más que parte del proceso de expresión de mi interior, porque siempre ocurre algo que me hace parar y pensar en ello con detenimiento, sin dejar que pase al olvido como un momento más de nuestras vidas. A veces me faltan incluso palabras para poder describir lo que esa sensación me provoca, a veces me cuesta compartirlo con alguien porque temo a pecar por exceso de análisis y volver a sentirme diferente. En cualquier caso no tengo ni idea de lo que voy a escribir aquí exactamente, porque igual hablo de una de las miles de historias de mis viajes que tanto adoro hacer, o de un libro, una canción, una película, un cuadro, un amigo, alguien que he conocido, o la farola con la que me he tropezado en el camino. Me gusta analizar las cosas y filosofar sobre la vida, y creo que eso es lo que pretendo a través de lo que escribo, que por otro lado siempre he querido hacer, ya que  antes de la era de internet ya plasmaba mis ideas y pensamientos en diarios y cuadernos.


Así que alcen sus copas porque hoy quiero hacer un brindis por los chichones, que me enseñaron a  volver a levantarme para seguir contemplando el mundo recabando información que desde hoy quiero plasmar en este blog. A ver si no se me cae la copa de las manos...Chin Chin! 



Os dejo con una canción que habla un poco del proceso de cambio que he experimentado en mi vida y del que hablaba más arriba:


Foto: http://www.luxelivingforum.com/how-to-treat-minor-kid-injuries/